EDITORIAL

El Saber Psicológico como Herramienta para la Humanización y Transformación de los Pueblos

Argeli Arango Vásquez

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Referencia Recomendada: Arango, A. (2015). Editorial. El saber psicológico como herramienta para la humanización y transformación de los pueblos. Revista de Psicología GEPU, 6 (2), 5-7.

Información de la autora: Psicóloga de la Universidad del Valle, maestreando en Psicología Línea de profundización teórica en Psicología Social de la misma universidad. Miembro del Grupo Estudiantil y Profesional de Psicología Univalle – GEPU. Editora Revista de Psicología GEPU y Coordinadora de la Línea de Investigación Praxis y Transformación Psicosocial del Grupo de Investigación GEPU. Correo electrónico: argeli.arango@correounivalle.edu.co 

El pasado 06 de marzo de 2016, el Grupo Estudiantil y Profesional de Psicología Univalle –GEPU cumple 9 años de incansable labor y ejemplo de organización de base estudiantil comprometida con la gestión de conocimiento integral aplicado, permitiendo la participación activa de los estudiantes y profesionales de psicología, y de las ciencias sociales en general, que han optado por una psicología comprometida con la transformación social, contrario a la formación y ejercicio de la psicología tradicional que se orienta hacia acciones poco comprometidas o neutras respecto a la solución de los grandes problemas que aquejan a nuestra sociedad. Como organización, el GEPU se ha orientado a favorecer escenarios de dialogo y participación entre el estudiantado dentro y fuera de la Universidad, para pensarse una psicología de carácter investigativo y praxis al servicio de la comunidad. 

El grupo de investigación con sus diferentes líneas temáticas, la revista de psicología y las jornadas psicológicas GEPU, han cumplido un propósito fundamental dentro de los objetivos del grupo: Fortalecer los espacios de intercambio académico de la psicología desde la interdisciplinaridad, pensando la profesión desde un equilibrio entre lo académico y lo pragmático, entre lo político y la praxis cotidiana de una psicología comprometida con la transformación social. 

Al respecto, es pertinente retomar algunos de los planteamientos del célebre psicólogo social Ignacio Martin Baró en su conferencia pronunciada en San Salvador el 22 de Junio de 1984, en el marco de la inauguración de la "I Jornada de la Salud Mental" donde manifestaba que pensarse el tema de la Salud Mental en un escenario de guerra, de problemas de desempleo, hambrunas, y desplazamientos, podría parecer una “frivolidad”, sin embargo, para Martin-Baro la salud mental no podía ser concebida como el “buen funcionamiento del organismo humano” o la ausencia de trastornos psíquicos, definiciones que obedecían a una concepción parcial y superestructural de la salud mental, sino que esta debía ser entendida en términos más amplios.

En este sentido, Martín-Baro proponía entender la salud o el trastorno mental como parte y consecuencia de las relaciones sociales, es por esto que la pregunta sobre la salud mental de un pueblo nos debe llevar a preguntarnos por el carácter de sus relaciones, tanto interpersonales como intergrupales. De esta manera, la noción de salud mental nos permite apreciar el sentido y el impacto que tienen los distintos acontecimientos naturales, socioeconómicos o políticos sobre las relaciones humanas de un determinado pueblo. La pregunta que hacía en esa conferencia Ignacio Martin-Baro hace más de 30 años, la seguimos trayendo hoy a consideración: “¿Qué debemos hacer nosotros, profesionales de la salud mental, frente a la situación actual que confronta nuestro pueblo?”

La propuesta de Martin-Baro era pensarse en buscar o elaborar modelos pertinentes para captar y enfrentar la peculiaridad de los problemas de nuestros pueblos. Lo que exige conocer más de cerca nuestra realidad, una realidad que el describía como “pluriforme” y que constituye un reto en nuestros esquemas de trabajo tradicionales. El llamado en ese momento, era el de: “Examinar nuestros presupuestos teóricos, no tanto desde su racionalidad intrínseca, sino desde la racionalidad histórica, es decir, de sí sirven y son realmente eficaces en el aquí y ahora”. 

Pero esto, ¿Que exige para los profesionales de la salud mental? ¿Y en particular para nosotros profesionales de la psicología? Pues nos obliga en primer lugar a dejar de a un lado la inercia profesional, a movernos y deshacernos de lo que Martín-Baro denominada como “el velo de mentira” de nuestra ciencia y volver la mirada hacia nuestra existencia social. De acuerdo con este autor, entendemos que la base de la salud mental de un pueblo se encuentra en la existencia de unas relaciones que tienen la característica de ser humanizadoras, con vínculos donde los cuales se afirma la humanidad personal de cada uno y no se niega la realidad de nadie, de esta manera la construcción de una sociedad más justa, no es solo un problema económico y político; sino que es también un problema de salud mental.

Hoy 32 años después de esta reflexión de Ignacio Martin-Baro, la invitación es a recuperar una función profesional del psicólogo basada en la promoción social de las personas y comunidades, como un planteamiento alternativo a la visión histórica tradicional que visualiza el quehacer profesional exclusivamente de carácter diagnóstico, psicopatológico y remedial.  De esta manera, manifestamos nuestro interés como Colectivo, de pensar en la tarea del ejercicio de la psicología como ciencia con compromiso social hacia la forja de una sociedad transformada en espacios humanos más justos, equitativos, solidarios, creativos, autónomos y libertarios. Tarea donde todos podemos y debemos ser protagonistas.

Igualmente, bajo este mismo propósito, la Revista GEPU en sus 6 años de circulación, reitera su compromiso de integrar a los psicólogos del contexto latinoamericano con los de otras regiones del mundo, así como a otros profesionales vinculados a las ciencias sociales, con la posibilidad de analizar y establecer alternativas de solución a la problemática psicosocial de nuestros pueblos. Resaltando la importancia del intercambio, debate y reflexión profesional, que se forjan desde otros espacios más allá de las aulas universitarias: Los grupos estudiantiles, los colectivos, las organizaciones de base, entre otros, y que permiten contribuir al fortalecimiento de la psicología latinoamericana. 

De esta manera, invitamos a que sigan enviando sus artículos de investigación y/o reflexión a nuestra revista, y de este modo contribuir con la tarea investigativa, reflexiva y de praxis transformadora que lleva a cabo el Grupo Estudiantil y Profesional de Psicología Univalle GEPU. Esperamos seguir trabajando de la mano en nuestro objetivo común, resumido en la siguiente frase:

El saber psicológico debe ponerse al servicio de una sociedad donde el bienestar de los menos no se asiente sobre el malestar de los más, donde la realización de los unos no requiera la negación de los otros, donde el interés de los pocos no exija la deshumanización.  Ignacio Martin Baró (1942-1989).